PSICOMOTRICIDAD INFANTIL

Es una práctica que trabaja con el movimiento espontáneo de la persona, integrando el cuerpo, las emociones, las sensaciones, la comunicación y la cognición a través del juego en relación. Esta práctica se desarrolla a través de dos marcos distintos, la práctica psicomotriz educativa y la practica psicomotriz terapéutica.

La práctica psicomotriz, tanto educativa como terapéutica, es uno de los ejes sobre los que pivota Gure. Apostamos por una intervención de calidad y seriedad, dando a las niñas y niños y sus familias el lugar que tienen, promoviendo la escucha y la reflexión, para poder dar sentido a lo que ocurre y favorecer la maduración y evolución en el desarrollo. Para ello, contamos con una profesional cualificada por su experiencia en el ámbito terapéutico infantil, y por su formación en una de las escuelas pertenecientes a la ASEFOP (Asociación Europea de Escuelas de Formación en Práctica Psicomotriz) que realiza formación en Práctica Psicomotriz de Acouturier: Luzaro (Escuela de Psicomotricidad de la UNED).

Práctica psicomotriz educativa-preventiva

Tiene como objetivo acompañar y favorecer la maduración psicológica y el desarrollo armónico de niñas y niños en relación con sus iguales.

Se trata de facilitar el proceso que va desde la acción, la sensación, el cuerpo, hacia el acceso al mundo simbólico y las representaciones mentales, conscientes e inconscientes.

Se lleva a cabo en grupo en la sala de psicomotricidad, donde partiendo del movimiento y la acción espontánea las niñas y niños juegan entre sí.

El encuentro en la sala se da con una periodicidad semanal, el grupo de participantes es el mismo, y las sesiones se organizan a través de tiempos diferenciados.

El espacio y el material que se ofrece, así como la estructura temporal que se establece, posibilitan la expresión, la relación, la acción, la comunicación y la movilización emocional para que pueda ser integrada en el pensamiento.

Terapia psicomotriz o psicomotricidad terapéutica

Se llevará a cabo a través de sesiones individuales o en pequeño grupo de ayuda y una terapeuta psicomotriz.

Esta terapia está dirigida a niñas y niños que necesitan una ayuda específica ya que presentan manifestaciones sintomáticas que dificultan su proceso madurativo: dificultades en la comunicación, en las relaciones con iguales o con los adultos, en el acceso a aprendizajes en la escuela, en la motricidad, en la integración de sensaciones, en la simbolización, en el control emocional.

Se tratará de acompañar a elaborar en la medida de lo posible lo que le sucede y así poder crear nuevos recursos para posicionarse desde otro lugar, abrirse a lo nuevo, a las relaciones, construir una mayor seguridad de sí mismos, acceder al simbolismo, a la comunicación, a lo cognitivo, o simplemente a sufrir menos. Se posibilita la expresión de los malestares que invaden al niño y a la niña y así poder comprender su historia profunda que manifiesta por la vía corporal.